miércoles, 20 de noviembre de 2019

Recuerdos del mundo

EUROPA EN EL PARABRISAS
Robert Byron
Editorial Confluencias


Este es un libro de "Reflexiones tras un viaje en coche de Grimsby a Atenas", un libro "sin pretensiones literarias", aclara su autor, publicado en 1926. En agosto de 1925 tres amigos, compañeros de estudios en Oxford, emprenden un viaje por Europa a bordo de un automóvil -que llaman Diana- atiborrado de baúles, incluyendo uno lleno de libros y otro de licores. Son ricos, solo las personas adineradas podrían hacer un viaje así; son jóvenes, educados, y sobre todo, son muy ingleses. 
Diana. Dibujo de R. Byron

Viajan por una Europa que "tomada en su conjunto, es una gran desconocida para la mayor parte de sus habitantes, sumergidos en la desastrosa tradición de unos Estados aislados y armados hasta los dientes". El autor piensa que puede contribuir "de alguna forma a un nuevo sentido de 'Conciencia Europea' que se esté fraguando gradualmente".
Nuremberg. Dibujo del autor

Robert Byron
El viaje empieza en Alemania, cuando aún no existen los viajes de placer hacia allá, pasa por Austria, por Italia y termina en Atenas. Transitarán por una Europa de entre guerras, con vías en regular estado, ciudades incomunidadas entonces entre sí, dificultades burocráticas, con el fascismo rondando como una sombra, y caminantes alemanes mendigando a cambio de canciones, jóvenes universitarios que después de la primera guerra no vislumbran un presente ni un futuro.

En Berlín las diversiones han sido proscritas; en Nápoles, la pobreza deslumbra  bajo el sol; en Patras los acosan los niños mendigos y vendedores al punto que "cansados de tanta humanidad", se fueron a tomar el té. En Atenas encuentran que "es la capital europea en la que las tradiciones inglesas tienen las raíces más profundas", y el culto a Lord Byron (no tengo claro si fue su antepasado o no),  es lo que mantiene siempre viva a Inglaterra a los ojos de los griegos.


Para los lectores viajeros de hoy es interesante ver cómo evolucionó Europa desde los años 20 y cómo efectivamente se fue formando una "conciencia europea" a lo que el autor de este libro quiso contribuir. Y cómo mantienen permanencia, varias décadas después, las observaciones arquitectónicas y artísticas de Byron, los sitios que le gustaron, las costumbres de los pueblos. 


Orvieto
Ravena
Hoy, pese al desbordado turismo que recorre las ciudades de Europa, muchas veces inculto e ignorante de la historia, a algunos viajeros nos  siguen deslumbrando estos lugares,  la cúpula azul y dorada del mausoleo de Gala Placidia en Ravena, con sus delicadas ventanas de alabastro; Florencia y la canción de los olmos junto al Arno; la luz iluminando los mosaicos dorados de la catedral de Orvieto; Siena atardeciendo, y la sombra de las torres de San Gigminiano; el mar de Atenas que, al igual que a Byron, nos sigue diciendo "vuelve".
Caminos de Grecia
Robert Byron (Wembley, Reino Unido, 1905- Cabo Wrath, Reino Unido, 1941), fue uno de los grandes viajeros y autor de libros de viajes del siglo XX; se educó en Eton y Oxford como crítico de arte e historiador.  Entre sus obras se encuentran Viaje a Oxiana, Rusia, viajes por un mundo cambiante, VIaje al Tibet, Grecia, viaje al monte Athos. En un viaje a Oriente Medio en 1941, el carguero en el que viajaba fue torpedeado por un submarino nazi. En Europa en el Parabrisas, dice Bayron al pasar por Baviera que ésta era la zona más alemana de Alemania y que era ahí donde debía temerse un renacimiento del militarismo. Era 1926, regía la República de Weimar surgida luego de la derrota en la primera guerra; se gestaba la segunda guerra; Byron tal vez la sentía en el aire de esa Europa que recorrían, esa guerra que cortaría abruptamente sus viajes por el mundo.