sábado, 9 de octubre de 2010

Retrato de un país

TANTA SANGRE VISTA
Rafael Baena
Editorial Alfaguara

Una guerra, una de tantas entre hermanos; la gente es arrastrada por un río de odio que no comprende, pero que se les impone, que heredan, y que viven como si estuviesen solos en el mundo, porque en las ciudades, en la capital, la vida continúa como si nada, indiferente, superficial, egoísta.
Este es el retrato que nos dibuja Rafael Baena (Sincelejo, Colombia, 1956), recreando a varias voces y en dos tiempos, una guerra que puede ser la de los mil días, o cualquiera otra guerra decimonónica, que simplemente cambia de nombre y de época, pero que es la misma que continúa envolviéndonos aún en este siglo veintiuno, amparada en la falta de solidaridad social y en la ineficiencia de un estado que no es capaz de cumplir su elemental fin de proteger la vida, honra y bienes de sus habitantes.
La historia está bien escrita, en un estilo ágil y ameno, con saltos hacia el pasado que van completándola hasta redondearla. Es una historia compleja, de la cual sólo podemos dar un esbozo: El coronel Enrique Arce comanda el Cuarto de Lanceros del ejército insurrecto del general Almagro, enfrentado al general Lázaro Hidalgo, del ejército oficialista; liberales contra godos. Vencido el ejército liberal, Arce se confina en Aguazarca, una hacienda regalada por Almagro a su sobrina nieta, Camila, con quien se casó superando sus resistencias y resabios; se hace cargo de Ricardo, su nieto, pero aún quedan en los montes bandoleros, guerrilleros, delincuentes, perpetuando la violencia, generando su contraparte, los ejércitos privados o los grupos armados de campesinos defendiendo la tierra que les queda, mientras en la ciudad la corrupción agranda sus tentáculos. Nuestra historia, en fin, la historia de un pobre país saqueado, agredido, que aún no logra encontrar el camino para cerrar heridas y comenzar a vivir en paz.

Rafael Baena es fotógrafo y periodista; editor de la Revista Credencial. Escribió, también, ¡Vuelvan caras, carajo!, novela de ambientación histórica que nos devuelve otro trozo de nuestra historia, ésa que todo colombiano debería conocer para no repetir sus errores. Vale la pena leer a este escritor nuestro que ha empezado a transitar con éxito el difícil camino de la literatura.
PS: El libro "Tanta sangre vista" tiene algunos errores gramaticales que el editor debería haber corregido.